martes, 31 de enero de 2017

El subdirector del programa "El día del Señor" califica de espectacular la retransmisión de la misa desde Villena

Francisco Javier en plena locución
Eel marco de la celebración del Centenario de Salesianos Villena, el pasado día 29 de enero, el programa “El día del Señor” de La 2 de RTVE, retransmitió la celebración de la eucaristía desde la Iglesia arciprestal de Santiago Apóstol de Villena.
Como se apreció en la pantalla, el programa se inició con un breve reportaje de la labor de los salesianos en la ciudad, la Familia Salesiana y la comunidad educativa, así como los aspectos más importantes de la ciudad de Villena. Cabe recordar que el reportaje, se grabó en el colegio y en las calles de Villena durante el mes de noviembre del pasado año.
Francisco Javier Valiente Moreno, Salesiano delegado inspectorial de comunicación social y subdirector del programa “El día del Señor, coordinó todo el proceso al frente de un equipo de más de 20 técnicos que se encargaron de que la retrasmisión fuera un éxito. 

Afirma que se hace el programa esperando llegar al corazón de la gente, y presentando la bella realidad de nuestra Iglesia. "El programa desde Villena ha resultado muy bien. Todo el equipo nos hemos sentido bien acogidos. Por supuesto, la comunidad salesiana nos abrió sus puertas para poder grabar en el centro. También la parroquia de Santiago y el Ayuntamiento, nos han dado toda las facilidades para poder realizar el programa", comenta Francisco Javier.
Unidad móvil de RTVE pasa por el colegio  Foto.Jesús Rubio
Referente a la participación en la eucaristía, el subdirector del programa señala, que "nos ha llamado positivamente la atención de participación masiva de gentes de Villena en la eucaristía y, cómo no, el coro de Salesianos Villena que animó la celebración con un estilo salesiano y juvenil".

Así mismo, agrega que en su resumen que "el marco de la Iglesia de Santiago ha sido espectacular para la retransmisión. Así que podemos estar contentos del trabajo realizado", concluye.
Cabe recordar que Ángel Asurmendi Martínez, Vicario Inspectorial de la inspectoría Salesiana de María Auxiliadora, a la cual pertenece la Casa de Villena, fue el encargado de presidir la eucaristía, acompañado de Salesianos y de sacerdotes de la ciudad.

Este acto recordó una de las primeras retrasmisiones de TVE en Villena, cuando el 19 de noviembre de 1967, el día del 50 aniversario de la llegada de los salesianos de la ciudad se televisó, también desde la Iglesia de Santiago, la solemne eucaristía presidida por el Arzobispo de Alicante, Don Pablo Barrachina.


Grabando interior de Santiago

Celebración de la eucaristía


Recuerdos de ayer

Fachada del colegio antiguamente


La "bola" un referente del colegio

Pl. Santiago y las unidades móviles







SE CELEBRA LA FESTIVIDAD DE SAN JUAN BOSCO EN EL MARCO DEL CENTENARIO DE LOS SALESIANOS EN VILLENA


 “Uno solo es mi deseo: que sean felices en el tiempo y en la eternidad”, dejó escrito a sus jóvenes el gran San Juan Bosco, fundador de la Familia Salesiana y declarado “padre y maestro de la juventud” por San Juan Pablo II.  Don Bosco nació un 16 de agosto de 1815 en I Becchi, Castelnuovo D’ Asti (Italia). A sus dos años murió su padre y su mamá, la “Sierva de Dios” Margarita Occhiena, siendo analfabeta y pobre, se encargó de sacar adelante a sus hijos.
A los nueve años Juanito tuvo un sueño profético en el que vio una multitud de chiquillos que se peleaban y blasfemaban. Él trató de hacerlos callar con los puños, pero se apareció Jesús y le dijo que debía ganarse a los muchachos con la mansedumbre y la caridad. Asimismo, Cristo le mostró a la que sería su maestra: la Virgen María.
Luego, la Madre de Dios le indicó que mirara donde estaban los muchachos y Juan vio a muchos animales que después se transformaron en mansos corderos. Al final, la Virgen le dijo estas memorables palabras: “A su tiempo lo comprenderás todo”.
Poco a poco fue creciendo en Juan un gran interés por  los estudios, así como su deseo de ser sacerdote para aconsejar a los pequeños. No obstante, para lograrlo, muchas veces tuvo que abandonar su casa y trabajar en diferentes oficios que, en el futuro, él enseñaría a sus muchachos para que se  ganen un sustento.
Ingresó al seminario de Chieri y conoció a San José Cafasso, quien le mostró las prisiones y los barrios bajos donde había jóvenes necesitados. Recibió el orden sacerdotal en 1841 y buscando prevenir que los muchachos se pierdan en malos pasos, entonces inició el oratorio salesiano que desde  sus inicios reunió a cientos de jóvenes.
 Al principio esta obra no tenía lugar fijo hasta que logra establecerse en el barrio periférico de Valdocco. En una ocasión cayó gravemente enfermo, pero al recuperarse Don Bosco prometió dar hasta su último aliento por los jóvenes.
San Juan Bosco se entregó de lleno a consolidar y extender su obra. Brindó alojamiento a chicos abandonados, ofreció talleres de aprendizaje y, siendo un sacerdote pobre, construyó una iglesia en honor a San Francisco de Sales, el santo de la amabilidad.
En 1859 fundó a los Salesianos con un grupo de jóvenes y más adelante cofunda las Hijas de María Auxiliadora con Santa María Mazzarello. Luego también dio  inicio a los Salesianos Cooperadores. Además, sólo con donaciones, construyó la Basílica de María Auxiliadora de Turín y la Basílica del Sagrado Corazón en Roma.
San Juan Bosco partió a la Casa del Padre un 31 de enero de 1888, día que la Iglesia celebra su fiesta, y después de haber hecho vida aquella frase que le dijo a su alumno Santo Domingo Savio: “Aquí hacemos consistir la santidad en estar siempre alegres”.